Consejos de seguridad para niños que viajan en automóviles
Cuida tu velocidad.
Al conducir a altas velocidades, una frenada brusca puede producir un impacto en la cara del niño, o incluso provocar la caída de todo el vehículo. Por tanto, es muy importante mantener una velocidad estable y garantizar un tiempo de respuesta suficiente.
Asegúrate de que el niño esté sentado y quieto.
Cuando los niños estén en el coche, asegúrese de mantenerlos sentados firmemente. Especialmente los niños que van sentados en el asiento trasero pueden caerse fácilmente y provocar lesiones si el coche está inestable.
Ruedas e instalaciones de protección
Para evitar que los pies de los niños queden atrapados accidentalmente en las ruedas, se recomienda instalar instalaciones de protección en las ruedas. Esto no sólo evitará lesiones en los pies, sino que también mejorará la seguridad en la conducción.
No dejes que los niños se suban a los pedales.
Pararse sobre el pedal delantero aumentará el riesgo de caídas y afectará a la estabilidad de conducción de los padres. Al mismo tiempo, en este caso es más difícil evitar riesgos de forma segura.
No hay taburetes en los pedales.
Sentarse en un taburete y pedalear no solo puede provocar que el niño golpee objetos duros, sino que también afecta a su comodidad al conducir y aumenta el riesgo de accidentes.
Andar en bicicleta sin bufanda larga
Una bufanda larga puede volar con el viento y enredarse en los escombros al costado de la carretera, causando lesiones. Al mismo tiempo, la bufanda podría quedar atrapada en la rueda, generando peligro.