Red de conocimientos turísticos - Curso de fotografía - Van Gogh pintó varios cuadros con las orejas cortadas.

Van Gogh pintó varios cuadros con las orejas cortadas.

Van Gogh pintó un cuadro de una oreja cortada.

Autorretrato después de cortarse la oreja es una pintura al óleo creada por el pintor postimpresionista holandés Van Gogh en 1889+0. Del 65438 al 0888, Van Gogh invitó a Gauguin a vivir en Arles, pero los dos artistas testarudos siempre se peleaban. Después de una acalorada discusión, Gauguin se marchó furioso. Incapaz de detener o contener su emoción, Van Gogh se cortó la oreja.

El mundo fue el primero en infectar al pintor humano con su locura, del mismo modo que una vez inyectó magia en sus pinceladas. Miramos el rostro distorsionado de Van Gogh, sus ojos horrorizados y sus gestos temblorosos de sorpresa: parecía sufrir por toda la raza humana y se convirtió en la encarnación del dolor.

Pensando en esto, podemos entender las líneas que luchan y los colores danzantes en las obras de Van Gogh: su sangre se mezcla con la pintura vertida, y el lienzo es solo un vendaje para sus heridas. Este es un maestro en vivir con trauma. Está acostumbrado a hablarle al mundo con heridas. Este es un segador del dolor cuya guadaña finalmente llega a sus oídos.

Fondo creativo

Mientras estuvo en París, creó un total de 8 autorretratos, desde el primer autorretrato con un sombrero de fieltro negro hasta el autorretrato frente a un caballete a principios de 1888. En febrero de 1888, Van Gogh viajó a Arles, una pequeña ciudad del sur de Francia, por recomendación de un amigo, marcando así el comienzo de la cima de su creación. Durante este período se realizaron tres autorretratos, como "Autorretrato de Gauguin" y "Autorretrato de Zha Er". Tras llegar a Remiel en 1889, pintó sus tres últimos autorretratos.

En 1888, Van Gogh invitó a Gauguin a vivir en Arlés. Al principio se llevaban bien, pero cuando Van Gogh enfermó, los dos artistas continuaron peleándose. Después de una acalorada discusión, Gauguin se marchó furioso. Incapaz de detener o contener su emoción, Van Gogh se cortó la oreja.