¿Qué debo hacer si se clavan clavos comunes en la pared?
1. Utiliza unos alicates
Si solo necesitas quitar un clavo, la forma más sencilla es utilizar unos alicates. Abra los alicates y colóquelos en la cabeza del clavo, luego sáquelos con firmeza. Si el clavo está firmemente colocado en la pared, es posible que deba golpear con cuidado la base del clavo con un martillo y luego intentar descubrirlo.
Usa un martillo
Cuando el clavo no esté lejos de la pared, puedes utilizar un martillo para derribarlo de la pared. Para quitar completamente los clavos de la pared, existen algunas técnicas sencillas que puedes utilizar. Primero, golpee la cabeza del clavo con un martillo para que se hunda ligeramente en la pared. Luego, use un pequeño trozo de madera o tablero de fibra para atrapar la cabeza del clavo en el interior y golpee suavemente el tablero de fibra con un martillo hasta que el clavo salga completamente de la pared.
Utiliza un ratón
Si necesitas quitar muchas uñas, un ratón es una mejor herramienta. El ratón funciona de forma muy parecida a un martillo, pero invade a menor profundidad, causa menos daño a las paredes y es más fácil de controlar. Cuando utilices el ratón, golpea primero la cabeza del clavo con un martillo para que se hunda. Luego, coloque el mouse sobre la cabeza del clavo y golpéelo ligeramente con un martillo. Las ratas matarán las uñas.
Utiliza un palillo
Si no quieres causar ningún daño a la pared, puedes intentar utilizar un palillo. Inserte el palillo en el espacio entre la cabeza del clavo y la pared, y luego húndalo hasta que la parte superior del palillo quede al mismo nivel que la cabeza del clavo. Luego, utiliza un par de alicates para quitar el palillo* y retira el palillo que se insertó por error.
En resumen, recuerda que la eficacia de fijación de los clavos depende de su tamaño, material y tipo de pared. Usar las herramientas y métodos adecuados le permitirá quitar los clavos fácilmente sin dañar la pared.