¿Cuán autodisciplinado era Chiang Kai-shek? Llevar un diario durante 50 años.
Muchas personas han llevado diarios, pero probablemente sea difícil encontrar algunas personas en el mundo que puedan persistir durante 50 años.
Chiang Kai-shek comenzó a llevar un diario en 1915 y no dejó de hacerlo hasta 1972, cuando no podía sostener un bolígrafo por razones físicas. Perseveró durante más de medio siglo. incomparable.
Un diario es similar a una actualización diaria. La diferencia es que un diario es privado mientras que las actualizaciones diarias son públicas. Hoy en día, cada vez menos personas llevan diarios y cada vez más personas escriben actualizaciones diarias, porque todo el mundo prefiere obtener el reconocimiento y el aprecio de los demás.
Me pregunto si Chiang Kai-shek decía la verdad cuando escribió su diario. ¿También te encuentras con el problema de no tener nada que recordar? ¿Estás abarrotando el recuento de palabras sólo para completar la tarea como yo?
Pero estas cuestiones no son importantes. Lo importante es que pueda perseverar durante 50 años. Vale la pena aprender de este espíritu.
Chiang Kai-shek nació en el seno de un pequeño comerciante de sal y no era considerado una persona de estatus o procedencia. La razón por la que más tarde se convirtió en presidente del Kuomintang no se debió sólo a la suerte, sino también a su fuerte autodisciplina.
Algunas personas pueden decir: "Escribir un diario no puede explicar el problema. Hay muchas personas maravillosas que nunca escriben un diario". Lo que quiero decir es que escribir un diario es sólo una apariencia. es que todo gran hombre tiene un ideal y la capacidad de autodisciplina.
Sin autodisciplina, relajarás tu autocontrol, te detendrás y te rendirás a mitad de camino. Sólo la autodisciplina te permitirá persistir hasta el final y nunca rendirte fácilmente.
No creo que tenga la perseverancia para insistir en mantener el ritmo del reloj diario durante 50 años, pero aún puedo hacerlo cuando un monje marca el reloj todos los días. Aunque el sonido de la campana no es lo suficientemente piadoso, si perseveras, aún podrás ejercitar tu cuerpo sin convertirte en monje.
La autodisciplina no necesariamente conduce al éxito, y el éxito no necesariamente requiere autodisciplina. Pero la autodisciplina siempre es mejor que la falta de autodisciplina. Al menos tendrás un cuerpo sano gracias a la autodisciplina.