¿Por qué la disposición de las lentes traseras de los teléfonos móviles nacionales se vuelve cada vez más fea?
La cámara trasera de un teléfono móvil generalmente es adecuada para capturar vistas lejanas y se han realizado algunas optimizaciones basadas en el principio de perspectiva del software. Al tomar retratos a corta distancia, el software no reconocía la escena, lo que provocó que el sistema optimizara el algoritmo basándose en escenas distantes, haciendo que el rostro pareciera un poco distorsionado.
Para selfies, la cámara frontal es mucho mejor. Al cambiar la distancia focal de la cámara frontal, es más adecuada para selfies, la dificultad de optimización es menor y hay menos escenas que reconocer. Además, los píxeles son más bajos que los de la cámara trasera y la eficiencia de procesamiento de la CPU es alta. Por tanto, existen especialidades en la industria y la tarea de tomar selfies todavía queda en manos de la cámara frontal.