¿Puedo lavar el interior de las zapatillas con agua?
1. Zapatos mojados: Echar los zapatos en un recipiente y llenar el recipiente con 2/3 de agua limpia. Tenga cuidado de que la temperatura del agua no supere los 45 grados. Esto se debe a que cuando se lavan zapatos deportivos en un ambiente de alta temperatura, los zapatos son propensos a deformarse. Deja que los zapatos se empapen con agua. Para zapatos de malla en general, puedes agregar un poco de detergente en polvo al agua. Nota: Nunca deje los zapatos en remojo en agua. No los dejes en el lavabo como si estuvieran empapando ropa sucia. Debes esperar medio día antes de lavarlos, para que los zapatos puedan volver a usarse cuando estén secos.
2. Lave la parte superior y el forro de los zapatos: Utilice un cepillo de dientes viejo, pero no utilice un cepillo de dientes viejo con cerdas rizadas. De hecho, también puedes comprar un cepillo de dientes nuevo con cerdas más suaves por más de 3 yuanes como cepillo especial para zapatos, o utilizar un cepillo para zapatos. No olvides cepillar la lengua. Lave los zapatos repetidamente 1 o 2 veces, vierta el agua sucia y reemplácela con agua limpia. Remoje los zapatos en el agua y cepíllelos con un cepillo de dientes sin jabón.
3. Salpicaduras de agua: Pon agua en las zonas esponjosas de la parte delantera y trasera de los zapatos y exprime un poco de agua con los pulgares. Luego toma la entresuela con los talones al frente y los dedos de los pies hacia atrás. Comience a balancear los brazos y realice movimientos de 5 a 6 veces hacia adelante y hacia atrás.
4. Secado: Puedes perforar algunos agujeros con los cordones de los zapatos y atarlos a una percha triangular. Al mismo tiempo, cuelga un zapato en un lugar fresco y ventilado como para secar la ropa. Es mejor utilizar bolas de papel o hormas para sostener los zapatos de cuero y evitar deformaciones graves.
Nota: A la hora de lavar los zapatos, también puedes utilizar un cepillo de dientes viejo. Sin embargo, no te cepilles con demasiada fuerza para evitar que se formen bolitas. Luego exprime la mayor cantidad de agua posible del zapato. Finalmente, coloca los zapatos en un lugar ventilado para que se sequen, teniendo cuidado de no exponerlos directamente al sol.