Red de conocimientos turísticos - Conocimiento fotográfico - Un breve análisis de los métodos de cuidado de la piel durante los viajes

Un breve análisis de los métodos de cuidado de la piel durante los viajes

Beber mucha agua es una prioridad absoluta cuando se viaja. Beber una cantidad adecuada de agua ligeramente salada puede reponer las sales inorgánicas eliminadas por el sudor y prevenir el desequilibrio electrolítico. La humedad del aire en un avión o tren es aproximadamente un 20 % menor de lo normal, por lo que querrás mantener la loción al alcance de la mano para reponer constantemente la piel expuesta. También puedes rociar agua mineral en tu rostro con frecuencia y dejar que las pequeñas gotas de agua permanezcan en tu rostro durante un minuto para hidratar tu piel.

Los pepinos, tomates, zanahorias y otras verduras durante el viaje no sólo se pueden consumir como frutas para complementar vitaminas y minerales, sino que también se pueden utilizar como medicamentos cosméticos. Corta estas verduras frescas en rodajas y pégalas en la cara y el cuello. Retíralas después de 10 a 20 minutos y masajealas suavemente para permitir que la piel absorba los nutrientes beneficiosos de estas verduras, que pueden proteger la piel y embellecer el rostro.

Utilizar agua de manantial de montaña para lavarse la cara durante el viaje también tiene un efecto embellecedor. Debido a que el agua de manantial de montaña está menos contaminada y contiene una variedad de minerales, puede prevenir las arrugas y la piel agrietada y mantener la piel suave y brillante.

A la hora de viajar al extranjero, las gafas de sol, sombreros para el sol, sombrillas y crema solar son indispensables. 20 minutos antes de salir, aplica con cuidado protector solar en tu piel, sin descuidar tus manos, tobillos y cuello. Si practicas deportes a gran escala o nadas en la playa, elige un protector solar resistente al agua y al sudor. Después de nadar, lávese el protector solar con un jabón flexible y luego aplique crema hidratante o aceite protector solar.

Si lamentablemente tu piel está enrojecida por el sol pero aún no se ha teñido de rojo, puedes frotar hojas de té frías en la zona enrojecida para reducir la sensación de ardor.

1. Utiliza siempre mascarillas nutricionales. La razón es que la mascarilla puede aislar temporalmente la piel del aire, de modo que la temperatura de la piel aumentará gradualmente, promoviendo así la circulación sanguínea. Los desechos acumulados en la epidermis llegarán a la capa superior de la piel a medida que el agua continúe evaporándose. Cuando se quita o limpia la mascarilla, la suciedad de la piel se eliminará a medida que la mascarilla se adhiera, como una limpieza profunda de la piel y, al mismo tiempo, puede complementar la piel con suficientes nutrientes. Por eso, el cuidado de la piel es fundamental cuando se viaja en primavera.

2. Baño de agua caliente adecuado: el clima es frío y el funcionamiento de varios sistemas del cuerpo humano es lento, lo que requiere estimulación externa para ayudar a su funcionamiento. Un baño de agua caliente adecuado (3-4 días) puede fortalecer el metabolismo de la piel, promover la circulación sanguínea y mantener un color de piel saludable.

3.Aplicar crema hidratante en toda la mejilla, prestando especial atención a aplicar un poco de crema hidratante oleosa en el contorno de ojos con piel fina. Cada vez que te laves la cara, límpiala con una crema limpiadora aceitosa para nutrir tu piel. Lo mejor es masajearse la piel antes de acostarse y frotar suavemente un poco de aceite de oliva en los labios para evitar que se agrieten y se pelen.

4. Lávate la cara con agua fría. El agua hervida fría puede mantener las células de la piel suficientemente hidratadas, haciéndolas lucir suaves, delicadas, brillantes y elásticas, especialmente para las personas que trabajan al aire libre.