¿Por qué no puedo vender acciones después de comprarlas?
En primer lugar, las fluctuaciones del mercado de valores van acompañadas de altos riesgos de inversión. El precio de algunas acciones puede fluctuar hacia arriba y hacia abajo en cuestión de segundos, lo que dificulta a los inversores tomar decisiones de venta informadas. Si vende una acción rápidamente cuando el precio cae significativamente, puede incurrir en grandes pérdidas. Por el contrario, si le preocupa que su valor siga aumentando y no las vende, las acciones se convierten en una "inversión muerta" y es posible que los inversores nunca puedan guardarlas y venderlas.
En segundo lugar, a veces el valor del capital de una empresa fluctúa más que el valor de las acciones en sí. Por ejemplo, algunas empresas siguen perdiendo dinero por diversas razones, pero debido a algunos acontecimientos del "cisne negro", el precio de las acciones de la empresa se dispara, sobreestimando el valor real de la empresa. Los inversores se apresuran a comprar estas acciones, pero debido a que el valor real de la empresa es menor que el precio de venta de las acciones, cuando quieran venderlas en el futuro, el precio de las acciones habrá caído significativamente.
Finalmente, hay empresas cuyos precios de acciones se basan en erotismo más que en fundamentos. Esto suele ocurrir en empresas con influencia social, cultural, religiosa o política. Los precios de las acciones de estas empresas pueden experimentar altibajos dramáticos y tienen un alto valor, pero sus fundamentos son siempre negativos. El público aumenta el valor de las acciones y muchas personas expresan sus creencias y valores personales comprando acciones. Sin embargo, a medida que pasa el tiempo, el valor de estas acciones puede caer bruscamente en cualquier momento debido a factores internos y externos, provocando así el problema de quedar atrapado.
En definitiva, las acciones no son sólo una transacción, sino también un activo. Los inversores necesitan excelentes habilidades de análisis y juicio para reducir la cantidad de acciones que no se pueden vender.