Aplaude, dispara, dispara en cualquier momento y en cualquier lugar
Hay un dicho que dice que ver la emoción no es gran cosa y a mucha gente le gusta mirar.
Hay cinco razones principales:
Primero, impulsado por la curiosidad, satisface tu curiosidad mirando.
Si estás caminando por la calle y de repente ves un grupo de personas reunidas, pase lo que pase, la mayoría de las personas optarán por acercarse y echar un vistazo. "Los transeúntes ven a una pareja pelearse y ser golpeados hasta el décimo grado de discapacidad" es una lección dolorosa si realmente no puedes evitar ver la emoción, te aconsejo que te mantengas alejado.
En segundo lugar, la falta de vida espiritual.
El fenómeno del espectador es más común en las zonas menos desarrolladas. A muchas personas modernas no les gusta leer ni pensar y se sienten vacías por dentro. Ver diversión es lo mismo que ver una película de palomitas de maíz. No es necesario pensar demasiado. Se trata de relajación y diversión.
En tercer lugar, existe una falta de respeto a la dignidad individual.
Por ejemplo, ver a una pareja pelear es en realidad asomarse a la privacidad de otras personas.
En cuarto lugar, regodearse de la desgracia.
La gente disfruta viendo a los demás tener mala suerte. Muchas comedias hacen feliz al público creando situaciones desafortunadas. Por ejemplo, caídas frecuentes, salpicaduras de barro, golpes, abandonos, etc.
En quinto lugar, ver la emoción puede aportar frescura a las personas que comen melones y también puede convertirse en un tema de conversación para ellos después de la cena.
Por ejemplo, la administración urbana y las fuerzas del orden pidieron a los puestos que llevaran las cosas a la tienda. No hubo disputa ni pelea. Solo este asunto, la calle fue bloqueada por quienes observaban la emoción y el público. La conversación fue animada.
En resumen, si te gusta ver la emoción en realidad está relacionado con los valores de una persona, su nivel cultural, su experiencia de vida, etc. Las personas con niveles espirituales y culturales más altos generalmente no están interesadas en ver la emoción.